Porción: 3 piezas de 120 gramos c/u.

 

Sin duda, la Medialuna es la joya de la panadería argentina, clásico de clásicos. Así como la boulangerie francesa adoptó el Kipferl (un pan originario y típico de la viennoiserie austríaca, con forma de medialuna) y que los franceses modificaron para obtener el croissant, luego panaderos inmigrantes de Europa que llegaron a Argentina popularizaron este tipo de bollería clásica, que evolucionó en manos porteñas a la famosa y querida Medialuna.

Mucho más carnosa que el croissant, sin tanta alveolatura y aire adentro, es un hojaldre de masa dulce, con la exacta humedad y firmeza para laminarse con un porcentaje nada discreto de mantequilla pura, de crema de leche, nada de margarinas ni aceites vegetales, nonono... 100% MANTEQUILLA.

Comer una medialuna recién horneada es, quizás, una de las cosas más ricas de la panadería. ¡Mega húmedas, tiernas que se desarman! Acompañalas con un buen y rico café, y va a ser, sin dudas, tu momento especial de la semana.

 

Conservación sugerida:

1-2 días en alacena a temperatura ambiente.

5–7 días en refrigerador con bolsa hermética.

Medialunas

$145.00
Medialunas $145.00

Porción: 3 piezas de 120 gramos c/u.

 

Sin duda, la Medialuna es la joya de la panadería argentina, clásico de clásicos. Así como la boulangerie francesa adoptó el Kipferl (un pan originario y típico de la viennoiserie austríaca, con forma de medialuna) y que los franceses modificaron para obtener el croissant, luego panaderos inmigrantes de Europa que llegaron a Argentina popularizaron este tipo de bollería clásica, que evolucionó en manos porteñas a la famosa y querida Medialuna.

Mucho más carnosa que el croissant, sin tanta alveolatura y aire adentro, es un hojaldre de masa dulce, con la exacta humedad y firmeza para laminarse con un porcentaje nada discreto de mantequilla pura, de crema de leche, nada de margarinas ni aceites vegetales, nonono... 100% MANTEQUILLA.

Comer una medialuna recién horneada es, quizás, una de las cosas más ricas de la panadería. ¡Mega húmedas, tiernas que se desarman! Acompañalas con un buen y rico café, y va a ser, sin dudas, tu momento especial de la semana.

 

Conservación sugerida:

1-2 días en alacena a temperatura ambiente.

5–7 días en refrigerador con bolsa hermética.